Septiembre, pico de la pandemia de muertes e infecciones en Nicaragua

El gobierno de Nicaragua «oculta» hasta 9.000 muertes por Covid-19

Un estudio titulado «Covid-19 y opacidad: datos de muertes en Nicaragua» concluyó que el gobierno de Daniel Ortega oculta la cantidad de personas infectadas por el covid-19 y las muertes, no realiza pruebas diagnósticas y subutiliza los fondos destinados a la lucha contra la pandemia.

“Las autoridades son responsables inicialmente de negar la pandemia, de no tomar medidas, y de encubrir su mala gestión, de venderle a la población la idea de que el Estado se preocupaba por ellos y estaba haciendo todo lo posible para salvarlos”, dice el estudio. , presentado el viernes.

La encuesta, realizada por el Observatorio para la Transparencia y Lucha contra la Corrupción, señaló que en Nicaragua hay alrededor de 6.000 a 9.000 muertes por covid-19 que no son reconocidas por las autoridades porque han sido atribuidas a otras causas con el fin de para reducir las estadísticas de la pandemia.

El cálculo de estas muertes se basó en estudios de exceso de mortalidad realizados por el Comité Científico Multidisciplinario, el Observatorio Ciudadano Covid-19, la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), CONFIDENCIAL, así como funcionarios de estadísticas de países vecinos. . En este último, se analizaron las estadísticas oficiales de mortalidad de Nicaragua, la tendencia histórica de las muertes, y se compararon con las cifras de los países vecinos.

La encuesta también señaló que «las estadísticas oficiales son escasas, confusas y cuestionadas por la comunidad médica y por la Organización Panamericana de la Salud (OPS)», y que «los datos públicos no permiten conocer los grupos más afectados ni el impacto en Trabajadores de la salud. «

La baja tasa de mortalidad de Minsa

Además, los investigadores destacan que la cifra de 211 muertes, registrada hasta el 23 de noviembre, es estadísticamente improbable y es 28 veces menor que la del Observatorio Ciudadano.

“Los datos del Observatorio Ciudadano muestran 1,7 veces más casos sospechosos y 28 veces más muertes que las reportadas por el Minsa, cuya cifra es muy baja. Probablemente haya un subregistro ”, dijo el investigador a cargo del estudio, quien dice que es poco probable que en Nicaragua haya muerto exactamente un ciudadano cada semana desde octubre de 2020.

Sin embargo, los datos del Observatorio Ciudadano también revelan un subregistro del número de infecciones, por lo que la tasa de muerte en comparación con el número de casos positivos de covid-19 en este grupo es tan alta: 19%. Esto es 9,5 veces superior al porcentaje global del 2%, que el Observatorio Ciudadano explica porque no se reportan todos los casos asintomáticos y leves porque solo el Minsa tiene la capacidad de registrarlos mediante pruebas.

Los investigadores también señalan que en el resto de países de Centroamérica mueren semanalmente entre seis y once personas por cada 10.000 habitantes. En Nicaragua, según estadísticas oficiales, nadie moriría.

A esto, el investigador jefe agregó que el escaso acceso que existe en Nicaragua para realizar pruebas de PCR, cuyo control es exclusivo del Ministerio de Salud. El costo es de US $ 150 por prueba y solo están disponibles para personas que viajan fuera del país, personal médico y pacientes extremadamente enfermos. Como resultado, según cifras oficiales, Nicaragua tiene el menor número de contagios de Centroamérica.

Señaló que esto refleja la vaguedad de los datos sobre covid-19, ya que en países vecinos se realizan entre 956 y 111 pruebas de PCR por 1000 habitantes, mientras que en Nicaragua el promedio es cero.

“La crisis del COVID-19 muestra las debilidades estructurales del sistema de salud nicaragüense, pero también del régimen político en el poder caracterizado por su autoritarismo, secretismo y graves violaciones a los derechos humanos que han provocado una grave crisis humanitaria, una de las más importantes en el región. , «Dijo.

Ejecución presupuestaria

El estudio también analizó la ejecución presupuestaria que realizó el gobierno de Ortega en 2021 y los préstamos recibidos para dar respuesta a la pandemia, por más de $ 185,4 millones. En estos predomina un bajo nivel de implementación, a pesar de que el país ha experimentado una fuerte ola de contagio y muerte y se ha rezagado en la cobertura de inmunizaciones durante los primeros diez meses de este año.

«El presupuesto de covid para el 2021 es de 5.014 millones de córdobas (aproximadamente 141 millones de dólares), lo que equivale al 1.0% del producto interno bruto (PIB) y a septiembre se había utilizado menos del 20%», dijo. reporte.

También señala que una de las pocas inversiones que Minsa mencionó este año es mejorar su capacidad para congelar vacunas como Pfizer, que ahora se pueden almacenar. Sin embargo, no hay información detallada sobre los fondos que utilizaron en esta inversión.

La investigación también cuestiona por qué tener fondos en el primer semestre de 2021 en Nicaragua dependió casi en su totalidad de las vacunas donadas y por qué las únicas compras que se realizan son a Cuba y Rusia, que ofrecen vacunas no autorizadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). También señala que el país no ha sido transparente ni siquiera en los datos de vacunación covid-19.

“Las estadísticas de vacunación no son consistentes ni se comparten en tiempo real. Según datos de la OPS, Nicaragua cayó del 7% de su población totalmente vacunada al 5 de noviembre al 32% en el informe publicado el 22 de noviembre. Esto representa un salto del 250% ”, dice el informe.

* Con información de la EFE

Este artículo fue publicado originalmente en español en Confidencial y traducido por Havana Times.

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