Cuando Harry y Meghan se mudaron a California, ignoraron el hecho de que el cultivo de cannabis era legal en ese estado.
La mansión está ubicada en Montecito, California, donde viven otras grandes y famosas personas como Oprah Winfrey, explica Vanity Fair.
Los otros vecinos de la pareja son: Tom Cruise, Gwyneth Paltrow o incluso Ellen DeGeneres y Ariana Grande.
Según las denuncias, el olor a marihuana es insoportable y proviene de una planta procesadora de cannabis, que cuenta con 20 invernaderos en la zona, comenta el diario cubano.
Debido a las constantes quejas del vecindario, la fábrica se comprometió a instalar un nuevo sistema de control de olores.
La casa donde viven Harry y Meghan fue comprada en 2015 y costó casi $ 15 millones, tiene 9 habitaciones y 16 baños, una cancha de tenis, una piscina, una para el té y otra para los niños invitados, así como una cabaña para invitados. , describe en la revista Vanity Fair.