El presidente Jorge Serrano en economía – Prensa Libre
El gobierno del presidente Jorge Serrano Elías comenzó el 14 de enero de 1991. El 25 de mayo de 1993 emitió un decreto presidencial para la regulación temporal del gobierno, en el que ordenó la suspensión de varios artículos de la Constitución Política de la República de Guatemala. La Corte Constitucional rechazó este decreto, el cual fue ejecutado el 1 de junio de 1993. Se exilió el 6 de junio de 1993, vigente hasta la fecha.
Durante este gobierno, publiqué 114 artículos a la semana sobre la economía de este gobierno, que fueron recopilados en un libro reciente de 315 páginas.
Al comentar este libro, el expresidente señaló que los valores emitidos por el Banco de Guatemala, conocido como Cenivacus, fueron una transacción temporal. Al observar el balance general del Banco de Guatemala al 30 de septiembre de 2021, publicado en Prensa Libre el 29 de octubre del mismo año, aparece en el pasivo una cuenta denominada Valores del Banco Central, por un monto de 57 mil 503 millones de quetzales, equivalente a 7 mil $ 435 millones. Esta observación es correcta.
El 14 de enero de 1991 comenzó con las arcas presupuestarias vacías y sin reservas monetarias internacionales. Durante el último año de 1990, la inflación estuvo por encima del 60% anual, fenómeno económico que no se había conocido en los 70 años anteriores, cuando se creó la moneda quetzal y se abandonó el peso español, a lo largo de los períodos de inflación de los presidentes Manuel. Estrada Cabrera, Carlos Herrera y José María Orellana. Este último resolvió el caso.
Durante el gobierno del presidente Serrano se adoptaron importantes medidas monetarias, fiscales y sociales, así como la implantación de la energía eléctrica.
A nivel presupuestario, se ha emitido una obligación de compra obligatoria para financiar las operaciones del Estado. Y posteriormente se realizó una reforma de las leyes tributarias que el Congreso aprobó el 9 de abril de 1992.
Las nuevas leyes fueron: impuesto sobre la renta, ISR (decreto 26-92) e impuesto al valor agregado, IVA (decreto 27-92), como fase inicial de las cinco nuevas leyes tributarias. Las otras fueron la modificación de la Parte III del Arancel de Importación Centroamericano; la Ley del Petróleo y sus Derivados y la Ley del Papel Sellado y Sellos de Ingresos.
Gracias a estas leyes tributarias, fue posible financiar razonablemente el presupuesto de ingresos y gastos estatales.
En el área monetaria, el Banco de Guatemala ha creado un nuevo documento de inversión en quetzales, denominado Cenivacus. Sin embargo, la tasa de interés fue del 36%, con una comisión a los suscriptores del 3%, lo que resultó en una cantidad muy grande de dólares que llegaron al país para invertir en Cenivacus. Las reservas internacionales de divisas se recuperaron instantáneamente en más de $ 500 millones.
La modernización del sistema financiero se impulsó con créditos del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo, que tuvo resultados con la reforma monetaria y bancaria de 2002.
Otro problema fueron los apagones. Hubo racionamiento de electricidad. Como algunos días solo había agua por la noche y al amanecer se decía que eran luces y no apagones. La falta de energía eléctrica se solucionó con barcazas que transportaban plantas eléctricas muy ruidosas que se instalaron en Puerto Quetzal.
La prima anual para los trabajadores del sector público y privado fue aprobada por el Decreto 42-92, pagadera en junio y julio, comúnmente conocida como prima 14.