La insólita reacción de un árbitro danés para disculparse por no darle más ventaja a la ley - Prensa Libre

La insólita reacción de un árbitro danés para disculparse por no darle más ventaja a la ley – Prensa Libre

El árbitro Nils Heer se convirtió en el protagonista de quizás la acción más clara del partido, ya que no aplicó una ley de ventaja como lo requieren las reglas. Esto impidió que el Fredericia, equipo de la segunda división de Dinamarca, igualara un partido en el que cayó en el tercer minuto.

Pitó una falta en el minuto 27 incluso cuando el balón estaba en el dominio del equipo visitante que iba a atacar, sin embargo, al darse cuenta de que tenía que dejar que el juego continuara, se tiró al suelo para disculparse.

El local Vendsyssel abrió el marcador a los 3 minutos gracias a Mikkel Wohlgemuth. Con este resultado, el equipo visitante intentó por todos los medios igualar. Y llegó esta oportunidad que la vieron con mucho potencial.

Fredericia y Vendsyssel jugaban la sexta ronda de la segunda división en Dinamarca. Muy rápidamente, esta acción, que fue retransmitida por la televisión danesa y que hizo reír a los narradores, se convirtió en un hecho viral.

El partido entre los dos equipos fue decisivo para Fredericia ya que querían estar en primera posición. Los habitantes marcharon en el octavo palco. Sin embargo, el empate llegó en el minuto 37 gracias a Christian Tue Jensen.

El colegiado salvó la jornada con este resultado, pero sí hubo el acto en el que se arrodilló en el terreno de juego y se puso las manos en la cabeza, para gran disgusto de los lesionados y las risas de los comentaristas que no podían entender el situación.

Terminó la prometedora ventaja de Andreas Sejr Lausen que impidió despejar a un defensa y tomó posesión del balón. Luego de una pelea, el delantero logró tocar el balón hacia el centro para Kristian Kirkegaard y lo pateó al sector izquierdo para la llegada de Samson Iyede.

Terminó el hecho, pero los futbolistas al ver su reacción solo lo perdonaron. Algunos se acercaron y lo golpearon en la espalda en señal de aliento.